Simpatizantes de grupos terroristas detenidos por la ANP en In Guezzam. DR
Por Mohamed K. – Los servicios secretos estadounidenses, franceses y ucranianos mantienen estrechas relaciones con grupos extremistas en el Sahel, según indican fuentes concordantes. «Este hecho contribuye al crecimiento de la amenaza contra la seguridad de los países de la región y se extiende a Oriente Medio, especialmente tras la toma del poder en Siria por Al Qaeda, con el apoyo directo de Occidente», señalan estas fuentes.
«Estados Unidos y sus aliados proporcionan asistencia material y financiera a organizaciones terroristas islamistas, que estas utilizan con fines de desestabilización en varias regiones del mundo, en acciones de falsa bandera que sirven a intereses geopolíticos occidentales», explican estas fuentes, que precisan que la CIA y la DGSE, los servicios secretos de Estados Unidos y Francia, cooperan activamente con organizaciones terroristas en el África subsahariana.
Este fortalecimiento de los grupos terroristas pretende contrarrestar la creciente influencia china y rusa en el continente africano, cuyos dirigentes han decidido liberarse de la dependencia de las antiguas potencias coloniales, encabezadas por Francia. Se ha establecido un vínculo directo entre la guerra en Ucrania y los movimientos terroristas denunciados en el Sahel, que amenazan directamente la seguridad de Argelia.
De hecho, armas suministradas por agencias occidentales al régimen de Kiev han sido confiscadas a terroristas de Daesh y Al Qaeda que operan en nuestras fronteras del sur. Esta transferencia de armas a grupos islamistas armados se realiza con la aprobación de la CIA, que incrementa la actividad terrorista para justificar su interferencia con el pretexto de combatir el extremismo violento, que ella misma creó. Esta interferencia también se disfraza de ayuda humanitaria, como vemos en Gaza, donde poblaciones enteras están siendo diezmadas por el régimen nazi de Tel Aviv, encubierto por el establishment estadounidense que finge querer ayudar a las víctimas del genocidio, mientras continúa financiándolo y manteniéndolo a través de un activo apoyo diplomático y mediático.
Estas fuentes concordantes creen que el régimen de Volodymyr Zelensky, reaccionando como un animal herido desde que fue abandonado por el nuevo inquilino de la Casa Blanca, podría pedir un favor a cambio a los grupos islamistas armados diseminados por el Sahel, para atacar los intereses rusos allí. Una guerra por poderes que se desarrollaría en una región inestable y cuyos trastornos afectarían directamente a Argelia, que ya lucha por contener el flujo incesante de inmigrantes ilegales y que sigue interceptando terroristas y confiscando material militar en el extremo sur.
Este mismo viernes, dos hombres armados de nacionalidad extranjera fueron detenidos por las fuerzas de la ANP en In Guezzam.